La codicia de Amable Aristy Castro

Aristy Castro, en su exitosa forma de hacer política.



Con el flamante senador de La Altagracia uno no pierde la capacidad de sorprenderse. Ahora el todopoderoso Amable Aristy Castro -que tiene seis períodos consecutivos en el Senado- dice que primero muerto antes de renunciar al Consejo Nacional de la Magistratura, instancia en la que el Senado designó al también reformista Félix Vázquez.
Aunque legalmente a quien le corresponde el cargo es a Aristy Castro, uno se pregunta con qué calidad moral éste exige legitimidad cuando todavía no se ha juramentado como senador de la citada provincia de la región Este, tras ser reelecto en los comicios de este año.
Alegando una suerte de indecisiones que rayan en la burla, también juega a quedarse con el suculento pastel de la Liga Municipal Dominicana, cuya dirección ocupa desde 1999, manejando a su discresión cuantiosos recursos.
Ahora pelea por su puesto en el Consejo Nacional de la Magistratura, la entidad que tiene a su cargo, entre otras atribuciones, la elección de los jueces de la Suprema Corte de Justicia.
Cuánta sed de poder don Amable, qué insaciable es usted....

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